El famoso sendero a Base Torres, en Torres del Paine, es uno de los más transitados y también uno de los más erosionados debido a su falta de diseño sostenible, escenario que cambiará con la construcción de nuevas secciones y mejoras, gracias al trabajo colaborativo de Reserva Las Torres, Conservation VIP, CONAF y Torres del Paine Legacy Fund.
Marzo 2022. Una de las postales más icónicas de nuestro país es el Parque Nacional Torres del Paine, orgullo nacional que nos posiciona en distintos rankings de turismo a lo largo del mundo como uno de los lugares imperdibles para los amantes de la naturaleza y la vida outdoor. Es por eso que cada año, cientos de turistas – tanto chilenos como extranjeros- llegan hasta la Patagonia chilena con un solo objetivo: vivir una experiencia única.
La aventura comienza con el sendero Base Torres, el que permite acceder a esta maravilla rodeada de paisajes, flora y fauna magallánica. Son 10 km que cruzan bosques, ríos y miradores sorprendentes, para dar finalmente con el espectáculo de las tres imponentes figuras de granito. Por eso, uno de los principales desafíos es la construcción de senderos más duraderos y amigables con el entorno.
Para Mauricio Kusanovic Olate, presidente de la ONG AMA Torres del Paine y director ejecutivo de Reserva Las Torres en Patagonia, “los senderos son vitales para las áreas protegidas y una de las prioridades es ir avanzando hacia senderos sostenibles que perduren en el tiempo. La mayoría de senderos del Parque y la Reserva Las Torres fueron huellas de animales que se siguieron usando, por lo que no tienen un diseño sostenible ni están preparados para las dinámicas de la montaña”.
En 2015 la ONG AMA Torres del Paine contactó a especialistas canadienses expertos en senderos sostenibles para ratificar lo que ya se pensaba. Fue en ese entonces que Jacob Brett (Sutra) y Veda Roberge, miembros de la organización Shuswap Trail Alliance, entregaron su categórico diagnóstico: el sendero debe cambiar su actual trazado entre ciertos sectores, así como muchos otros arreglos y mejoras. Todo esto, para mantener un cuidado más sustentable de su entorno.
Con el análisis entregado por el equipo canadiense, se desarrolló una campaña para levantar fondos y generar conciencia sobre la importancia de los senderos en los Parques Nacionales. Si bien el comienzo de la construcción estaba pensado para el 2020, la llegada de la pandemia impidió avanzar en los plazos, ajustando las fechas para este año.
El proyecto estuvo pausado debido a la pandemia, pero eso no impidió realizar alianzas que hoy dan su fruto. Durante el 2021 se logró el contacto con Conservation Volunteers International Program (Conservation VIP), un programa dedicado a restaurar senderos liderados por expertos que viajan a destinos lugares del mundo, colaborando con su expertise sobre estos temas.
CVIP lleva más de 15 años viniendo a Torres del Paine y han trabajado de la mano con CONAF y Torres del Paine Legacy Fund en proyectos emblemáticos como los puentes en las quebradas del Circuito Macizo Paine, Puente Francés, pasarelas en senderos del sector Dickson y el último sendero skottsberg entre Paine Grande y Francés. Es decir, conocen perfectamente el parque y sus necesidades.
Tomando esa experiencia es que se consiguió una alianza con 10 expertos internacionales de Estados Unidos, liderados por Conservation VIP, dispuestos a colaborar y dirigir cuadrillas para comenzar la reconstrucción del nuevo sendero.
“Para nosotros este es un proyecto emblemático que nos permite seguir apoyando y trabajando con empresas y entidades locales. Sabemos lo importante que es contar con senderos sostenibles en Torres del Paine y por eso, no podíamos quedar fuera de esta gran iniciativa”, comenta Garry Oye, director de Conservation VIP.
Siguiendo con el trabajo colaborativo público-privado, LATAM Airlines también se unió a este proyecto junto a Austral. Si bien ambas marcas ya eran parte de la campaña Tu Mejor Huella, hoy ratifican su compromiso sustentable apoyando con tickets aéreos y distintos aportes que permiten que esta iniciativa hoy sea una realidad.
Si bien este es un proyecto de largo aliento, ya que tomará años la construcción de todo el sendero, lo importante es que el trabajo ya comenzó. En primera instancia serán unos 3 km aproximadamente, con un nuevo sendero entre Las Torres y el Paso del Viento, permitiendo separar el uso de este camino (caballos y personas).
También se arreglarán varios sectores del sendero actual entre el Chileno y La Morrena, además de trabajos en este último lugar que estarán siendo liderados por Conservation VIP y Torres del Paine Legacy Fund.
Para aprovechar la estadía de los expertos en diferentes especialidades, se creó un programa para enseñar a locales técnicas de construcción sostenible de senderos, basada en estándares internacionales. Con esto, los voluntarios participantes obtendrán un certificado que valide lo aprendido durante los meses que dura la primera etapa de construcción.
“Tenemos una región de parques, y es muy importante que puedan aprender a construir senderos sostenibles y así colaborar en un futuro. Es un conocimiento que no se adquiere en esta zona y es súper relevante para la gente de la región”, asegura Mauricio Kusanovic.
Es importante mencionar que los trabajos realizados ahora en Reserva Las Torres cuentan con una consulta de pertinencia aprobada por el SEA. Con esto se asegura que todas las dinámicas utilizadas solo aportan a la conservación y la mejora de las condiciones actuales. En palabras simples, el sendero seguirá los estándares más altos internacionales en su construcción, cuidando no provocar impactos al medio ambiente del lugar.